La actitud en el recurso

Quizás este sea uno de los puntos más importantes de los que podríamos hablar. ¿Cuánto pesa el conocimiento bruto hoy?

Esto hace tiempo era un concepto muy simple y definido, necesitábamos realizar una tarea, llamábamos a alguien que supiera hacerla y listo, pero las cosas hoy cambiaron. Hoy simplemente no se puede decir “yo sé”, dado que el conocimiento hoy se compone de lo que saben otros, lo que se necesita es la capacidad de interpretar, de llevar adelante un sinfín de tareas que comenzarán con la capacidad de aprender de forma constante, de adaptar lo que aprendimos a un nuevo ambiente.

Así pasamos de la aptitud a la actitud.

Cuando buscamos un puesto a cubrir todo comienza con la gran pregunta, ¿qué necesito? y como decíamos, antes esto era algo más fácil. Hoy tendremos que ver hacia adelante y prever un mañana en el que ese recurso que vamos a traer tendrá que reconvertirse. Y es este es el punto en el que comenzamos a comprender que la aptitud es algo momentáneo mientras la actitud eterniza.

¿Actitud es igual a inteligencia?

No, la inteligencia es un plus para alguien positivo, pero la actitud es una mezcla de cosas y la primera de ellas es adaptación al cambio, seguida muy de cerca por la perseverancia y ahora si, sazonada con algo de inteligencia ya que esta última hará que toda mutación sea más simple.

La semblanza del líder

Una sonrisa consigue que un líder muestre calma, aplomo. Sin esa calma la actitud del grupo cambia, el estrés aumenta, el camino se hace incierto. Por eso es la postura y la tranquilidad de quien dirige la que se tiene que expandir y tomar el ambiente, la que tiene que actuar como un punto de partida en el que todo el grupo gana seguridad.

Poner una barrera a la actitud poco adecuada

Si todo se da como se debe un grupo sano tomará a cualquiera de sus miembros con una actitud inadecuada e intentará amoldarlo. Si sucediera a la inversa habremos encontrado una de tantas razones, desde una mala contratación a problemas de seguridad en el equipo, para desafectarlo del mismo.

Y así tendremos que asegurarnos de rever cualquier cosa que pueda estar afectando la actitud grupal como tal.

La actitud de quien dirige

Quien dirige debe ser el primero en enarbolar la bandera de la buena actitud, es aquel que tiene que tratar de llevar adelante esa fuerza, siendo motor y empujando a los líderes que lo ayudan, en la misma dirección.

Oír lo que dicen los líderes que comandan cada equipo pero también hacerse eco de las necesidades de cada una de las personas que los componen. Empujando en cada uno buenas sensaciones, caminos claros y positivos en lo actitudinal. Enseñar a que cada cosa que hagan por el proyecto y por sus compañeros la están haciendo finalmente por ellos mismos.

Actitud y motivación

Motivar correctamente es apuntalar las actitudes que buscamos en nuestra gente. Analizar y llevar a cabo políticas de bienestar son, en muchos casos, acciones sencillas que reportan enormes beneficios, una hora de una persona a la semana que de yoga junto a los escritorios, masajes de 15 minutos una vez a la semana, una reunión distendida al mes. Son todas acciones que le hacen un mimo a la persona y que la dejan con ganas de devolver lo bueno que se les da.

Premiar las buenas acciones y dar ejemplos con los que toman la actitud correcta, mostrar que la buena semblanza tiene siempre recompensa y enseñar a los grupos a propagar esa sensación, ya que cada buena acción individual mejorará a todo el grupo.

Es un juego de negativos y positivos en el que cada persona que llevamos al lado positivo es un motor de cambio.

El único limitante de la felicidad es la propia mente, por tanto es en la capacidad de la misma en la que tenemos que hacer foco, es ahí donde está el desafío, donde podemos mostrar un camino para la superación de cada persona que depende de nosotros. Donde debemos comenzar la tarea de construir y mantener buenas actitudes, porque es en ese preciso lugar en el que lograremos algo más que buena productividad, es en ese lugar en el que comenzaremos realmente a crecer.

Autor: F. Mesaglio

#Liderazgo #Teamplayers #IT #CTO #Octopus #dirección #comunicación